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Recientemente, la noticia de que la IA podrá clonar nuestras voces para responder llamadas de spam me hizo reflexionar. Si bien es una herramienta interesante para filtrar llamadas no deseadas, también plantea un desafío para los vendedores: ¿cómo podemos destacar en un mundo donde la tecnología ya permite evitar interacciones no deseadas?
La respuesta es simple, pero no fácil: debemos aportar valor real en cada interacción.
La IA está empoderando a los clientes para controlar su tiempo y atención. Esto significa que las tácticas de venta tradicionales, basadas en la interrupción y la insistencia, son cada vez menos efectivas.
Los clientes no quieren ser bombardeados con llamadas y mensajes genéricos. Quieren soluciones personalizadas a sus problemas, información relevante y un trato humano que les haga sentir valorados.
La Inteligencia Artificial no es solo una amenaza, sino también una oportunidad.
Podemos utilizarla para identificar a los clientes potenciales más prometedores y adaptar nuestro mensaje a sus necesidades específicas.
Además, permite al vendedor híbrido liberar su tiempo para centrarse en construir relaciones y ofrecer un servicio personalizado.
Conviértete en un asesor de confianza
Ofrece a tus clientes conocimientos, consejos y soluciones que realmente les ayuden a resolver sus problemas y alcanzar sus objetivos. Cada llamada, visita o conversación en las redes sociales debe ser una ocasión de aprender y compartir.
Construye relaciones sólidas
Dedica tiempo a conocer a tus clientes, sus necesidades y sus desafíos. No hay dos soluciones iguales, y el cliente a día de hoy exige cada vez más un mensaje personalizado para él. Por suerte, la IA puede ser una gran aliada para lograr ese grado de adaptación sin grandes esfuerzos individualizados.
Mantente actualizado
La tecnología avanza a un ritmo espectacular y abrumador. Mantente al día sobre las últimas tendencias y herramientas para seguir siendo relevante y competitivo. El upskilling es más importante que nunca, y debe incluir habilidades técnicas y también transversales. El vendedor debe ser capaz de usar la tecnología, pero también de aportar su valor diferencial frente a ella.
La IA está cambiando las reglas del juego en el mundo de las ventas. Los vendedores que se adapten y aprendan a aprovechar esta tecnología tendrán una ventaja competitiva significativa.
No se trata de luchar contra la IA, sino de utilizarla como una herramienta para mejorar nuestras habilidades y ofrecer un servicio de mayor valor al cliente.
Recuerda: el objetivo no es evitar que los clientes te atiendan con un "contestador automático", sino convertirte en la persona a la que siempre quieran escuchar.
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